Su majestad el Emperador Carlos V inaugurará el Festival procediendo al pinchazo del primer barril de Cerveza

21/09/09 Asociación Cultural San Rock-e

El Festival Europeo de la Cerveza contará con la colaboración de la Asociación Cultural Amigos del Desembarco de Carlos V 'El Palenque', que recreará la visita del Emperador a la Carpa del festival, papel representado por el actor Miguel Ángel Marsella.

En su visita a la carpa el emperador acompañado de todo su séquito dará por inaugurados los cuatro días de Festival y procederá al pinchazo del primero de los barriles que se prevéen consumir en las jornadas.

La Asociación 'EL Palenque' participa de manera activa en la celebración del 'último desambarco de Carlos V', fiesta que transcurre en la villa de Laredo durante el tercer fin de semana de septiembre y que este año ha alcanzado su décima edición. Con la festividad se recrea el último viaje del Emperador cuando arribó a la playa Salvé de Laredo antes de emprender rumbo al monasterio de Yuste donde finalmente terminaría sus días.

Curiosamente, uno de los aspectos más anecdóticos de la vida de Carlos V fue su sibaritismo. Amante de la buena vida, el buen yantar y con un gusto gastronómico exquisito, el monarca, conforme a las costumbres cortesanas de la época, necesitaba jactarse de su buen comer y beber como expresión del prestigio de su cargo imperial y por la arraigada tradición gastronómica de su lugar de origen.

Por lo tanto, como buen flamenco y borgoñón, además de poderoso personaje, no podía menos que marcar pautas en cuestiones de buena mesa.

Entre los placeres gastronómicos del Norte de Europa que quería seguir disfrutando en tierras meridionales se encontraba, naturalmente, la cerveza. Tanto apreciaba Carlos V esta bebida, que es considerado como su gran introductor en España, porque, aunque ya se conocía en nuestro país hacia el 1200 antes de Cristo, su consumo no comenzó a generalizarse hasta la llegada del monarca.

En aquella época, la elaboración de la cerveza dependía de la disponibilidad de lúpulo, que se cultivaba sobre todo en Flandes. Por esta razón, la cerveza se convirtió durante el siglo XVI en patrimonio casi exclusivo de flamencos y holandeses. Pero para darse gusto, y para seguir disfrutándola aún lejos de su tierra natal, Carlos V, a su llegada a España para ser coronado rey, trajo consigo una corte de maestros cerveceros. Estos caballeros, expertos en la elaboración artesanal de esta bebida, acompañaron al Emperador en su empeño por trasladar a nuestro país el gusto por la cerveza que imperaba en Flandes, dejando una estela de espuma allí por donde pasaran.

<< Noticias anteriores               Noticias posteriores >>